Lo que sigue se basa en una comunicación escrita por la Relatora Especial sobre la situación de las personas defensoras de los derechos humanos y otros expertos de la ONU. La comunicación fue enviada al Gobierno de México el 26 de julio de 2023. La comunicación permaneció confidencial durante 60 días, durante el cual se esperaba que el Gobierno respondiera. El Gobierno respondió el 28 de septiembre de 2023.
Desde el envío de la comunicación, otras integrantes del colectivo “Una Promesa por Cumplir” siguen en una situación de fragilidad. Su seguridad debe ser garantizada.
Esta es una versión más corta de la comunicación original.
ANTECEDENTES
Tema: el asesinato de Teresa Magueyal, defensora de los derechos humanos y madre buscadora de su hijo desaparecido en Octopan, Guanajuato, así como antecedentes de intimidación y agresiones físicas y verbales hacia madres buscadoras en México.
La Sra. Teresa Magueyal era madre buscadora de 65 años e integrante del colectivo de familiares de personas desaparecidas “Una Promesa por Cumplir”. Se convirtió en defensora de los derechos humanos cuando comenzó a buscar a su hijo José Luis Apaseo Magueyal, desaparecido el 6 de abril de 2020 en San Miguel Octopan, Celaya, Guanajuato. En 2020 formó parte de otro colectivo y después se unió a Una Promesa por Cumplir. La Sra. Teresa Magueyal era considerada una figura destacada dentro del colectivo en su pueblo San Miguel Octopan, pues era la representante en esa localidad, donde fue encargada de un memorial dedicado a personas desaparecidas en diciembre de 2022. Asimismo, la Sra. Teresa Magueyal participaba activamente en reuniones con la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas de Guanajuato (CEB), donde se informaba de los hallazgos y realizaba búsquedas en campo que resultaron en el hallazgo de fosas.
Constituido en 2021, el colectivo “Una Promesa por Cumplir” está conformado por alrededor de 80 a 100 familias de personas desaparecidas de diversos municipios de la zona Laja-Bajío y tiene sede en Celaya, Guanajuato. Las integrantes están principalmente en Pénjamo, Valle de Santiago y alrededor de Celaya, en colindancia con los municipios Juventino Rosas y Villagrán.
De 2019 a 2022, las desapariciones y agresiones a personas buscadoras en Guanajuato se multiplicaron, en relación con una alta incidencia de delitos de extorsión, secuestro, trata de personas y delincuencia organizada en la zona de Celaya. Según información recibida, San Miguel Octopan, Celaya, es una de las localidades más violentas del estado con alto número de asesinatos en la zona y presencia de grupos del crimen organizado que controlan la localidad y la región. En Guanajuato fueron asesinadas al menos cinco personas buscadoras de octubre de 2020 a la fecha, con posibilidad de vínculo a sus acciones de búsqueda.
ALEGACIONES
El 2 de mayo de 2023, alrededor de las 11.30 horas, cuando la Sra. Teresa Magueyal, de 65 años de edad, iba en bicicleta por la calle Melchor Ocampo –a la altura de un kínder– en la localidad San Miguel Octopan en Celaya, Guanajuato, dos hombres armados a bordo de una motocicleta le dispararon, privándola de la vida.
En el lugar había personas esperando a sus hijos e hijas que salieran del kínder, quienes al escuchar los disparos corrieron para resguardarse.
Según un testigo, minutos antes, la señora Teresa Magueyal se había percatado que la venían siguiendo dos hombres encapuchados y armados en una motocicleta.
Elementos de seguridad y paramédicos llegaron al sitio para auxiliar a la víctima, pero corroboraron que no presentaba signos vitales. La Policía Municipal de Celaya y la Guardia Nacional acordonaron el lugar hasta que llegó la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE) para el levantamiento del cadáver y las diligencias iniciales, recolectando como indicios: casquillos percutidos y la bicicleta de la víctima. La FGE inició la carpeta de investigación correspondiente, considerando su labor de buscadora como una de las líneas de investigación, según la información proporcionada por la Unidad Estatal de Protección de Guanajuato (UEP).
De acuerdo con el colectivo “Una Promesa por Cumplir”, la FGE no les habría brindado el número de la carpeta de investigación, ni informado a la familia de los avances en la misma. Por ello, tanto la familia como el colectivo, han manifestado su preocupación sobre el resguardo de los medios de prueba que se hayan recabado, como grabaciones de cámaras de seguridad, dictámenes de balística y las entrevistas de testigos. Incluso expusieron que, de recabarse los testimonios de las madres buscadoras integrantes del colectivo, tendría que garantizarse su protección con las medidas necesarias, decididas de común acuerdo con las afectadas.
PREOCUPACIONES
En la comunicación, expresamos nuestra profunda preocupación por el asesinato de la madre buscadora y defensora de los derechos humanos, Teresa Magueyal. Nos preocupa además sobre el efecto intimidatorio que estos hechos tendrían sobre el colectivo Una Promesa por Cumplir y todos los colectivos de búsqueda que realizan sus labores en un ambiente de constante intimidación y amenazas, inseguridad y riesgo por parte de grupos, cuyos intereses se ven afectados con las acciones de búsqueda, como el crimen organizado. Es sumamente preocupante que, a pesar de las denuncias presentadas sobre estos ataques, los casos se mantengan en impunidad y que no se hayan proporcionado medidas de protección efectivas a quienes ejercen esta legítima labor.
